jueves, 26 de febrero de 2015

Dependencia


Somos montañas rusas emocionales. Podemos estar en lo más alto y en cuestión de segundos podemos estar en lo más profundo.  
¿Esto a que se debe? Se debe a nuestra dependencia de factores externos para sentirnos agusto con nosotros mismos. Esta dependencia puede llegar a ser enfermiza debido a que si tenemos una mala racha, no vamos a salir ni levantar cabeza en la vida.
Dichos factores externos pueden ser: la familia, tu pareja,  los amigos o cualquier otro tipo de "vicio".      

Se ha expandido el virus de la pareja (aquel que sigue la ley de: si no tienes pareja no eres feliz) Yo más bien lo pondría en la categoría de "eres idiota". NUNCA, repito NUNCA puedes hacer que tu bienestar y tu feliz dependa de alguien porque nada es eterno. Las personas entran en tu vida, cumple su función y se van. Aferrarse a alguien para ser el motor de tus días es el peor error que puedes cometer. Solamente tu eres el capitán de tu vida y quién decide que hacer en cada momento.




Luego, tenemos a la familia. Si, la familia, la única constante en la vida (no siempre), la que te apoya en lo que hagas y extrapolan tus situaciones para aconsejarte lo que deberías de hacer. No siempre es necesario ese estrecho lazo de unión ya que te impide tanto pensar como realizar lo que tu quieres hacer. Para progresar nos tenemos que caer y volver a levantar. Una y otra vez.
Por otro lado, tenemos la dependencia de los amigos. El no saber estar solo es un gran problema ya que cuando no puedas quedar con tus amigos porque ellos tienen su vida y están ocupados, ¿qué haces?

Buscas cualquier motivo o escusa para salir con alguien aunque realmente no te apetezca estar con esa persona, simplemente por no estar ni sentirte solo. Hay que aprender/saber estar solo ya que la vida da muchas vueltas y nunca sabes donde puedes acabar.

Luego tenemos otro tipo de "vicio", véase como el salir de fiesta, emborracharse hasta límites insospechados, la obsesión por el deporte, etc. Todo esta bien en su justa medida y proporción pero, como ya he dicho antes, NUNCA  puedes dejar que solamente una cosa dependa de tu bienestar, porque si un día falla, ¿qué haces?

Solamente puedes y debes depender de una cosa: TÚ MISMO.



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